El rafaelino Agustín Pecantet, referente en el mundo del running y las ultramaratones, tuvo un fin de semana de doble desafío, con competencias en Brasil y Buenos Aires. Si bien logró buenos resultados, la experiencia estuvo marcada por desafíos inesperados que pusieron a prueba su resistencia.

“En Brasil la carrera era de 42 kilómetros, pero terminé corriendo 50, porque me perdí”, relató entre risas. “Llegué a un puesto de agua convencido de que me faltaba solo un kilómetro y medio, y cuando pregunté me dijeron que aún quedaban cinco. No lo podía creer”, recordó.

El error en el recorrido no solo implicó más distancia, sino también un esfuerzo extra de recuperación. “Gracias al asesoramiento de mi nutricionista, pude cargar energía y recuperar muchos puestos. El corredor tiene que prepararse no solo para la carrera, sino para todo lo que puede pasar en el camino”, explicó.

De Brasil a Buenos Aires: otro desafío en ultramaratón

Tras la dura prueba en Brasil, Pecantet volvió a competir en Buenos Aires, esta vez en una carrera de seis horas, correspondiente al campeonato de ultramaratón.

“La nutrición es clave, aunque yo a veces no le hago caso a mi asesora”, bromeó. “Ella siempre me insiste con la importancia de la recuperación y la alimentación, pero en la última parte de la carrera me mareé un poco y eso me pasó factura. Estuve casi toda la carrera alternando entre el primer y segundo puesto, pero al final quedé cuarto en la general”, contó.

A pesar de los desafíos físicos, el maratonista destacó la importancia de la mentalidad en el deporte. “El running te da muchas lecciones, y una de ellas es que lo importante es llegar. Hay momentos en los que el cuerpo dice basta, pero hay que seguir”, expresó.

A pesar de los altibajos, el atleta se mostró satisfecho con los resultados y con la experiencia vivida. “Esto recién empieza. El deporte te da revancha, y lo que importa es seguir creciendo y disfrutando cada carrera”, concluyó.

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