Boca sufrió una dura derrota por 2-1 ante River en el Monumental, por la fecha 15 del Torneo Apertura de la Liga Profesional. 

Tras el encuentro, Marcos Rojo fue el único jugador del Xeneize que enfrentó los micrófonos en la zona mixta y dejó un mensaje directo para los hinchas.

"No estamos en deuda con la gente, para nada. Trabajamos en el día a día. Hoy nos tocó perder, pero eso no cambia nada. Seguimos trabajando, eso los tiene que dejar tranquilos", expresó el capitán, con tono firme.

Además, Rojo hizo referencia al arbitraje de Nicolás Ramírez, que estuvo en el centro de la polémica: "Lo mismo de siempre. No entiendo qué estaba viendo el referí, pero bueno, ya está, siempre lo mismo. Es la segunda vez que nos dirige este muchacho, pero no voy a decir nada, ya se vio", deslizó, visiblemente molesto.

Por su parte, Fernando Gago también criticó el desempeño arbitral: "El árbitro condicionó el partido", aseguró el entrenador. Y explicó: "Tres amarillas en tan poco tiempo me dejaron en una situación de hacer cambios para el segundo tiempo".

En cuanto al análisis del encuentro, Gago se mostró autocrítico, pero también destacó algunos aspectos positivos: "Me voy con bronca por el resultado. Vinimos a tratar de ganar y en el segundo tiempo tuvimos chances y errores. El análisis más profundo lo voy a hacer después, pero me gustó la actitud del segundo tiempo", sostuvo.

El DT también justificó el planteo inicial: "La idea era aprovechar el posicionamiento de Miguel (Merentiel) para atacar las espaldas de los centrales, ante las ausencias de Milton (Giménez) y Edi (Cavani)", explicó.

Ahora, Boca intentará dar vuelta la página rápidamente: en la próxima fecha visitará a Tigre en Victoria, un duelo que servirá como preparación de cara a la etapa decisiva del torneo.