Impronta sudamericana en el 75° Congreso de la FIFA: propuestas para un Mundial 2030 histórico
Asunción fue sede del 75° Congreso Ordinario de la FIFA, un evento inédito en Paraguay que reunió a representantes de todo el mundo. Alejandro Domínguez pidió una celebración centenaria global, participativa y con 64 selecciones. El Mundial de Clubes también tuvo su lugar central.
Asunción se convirtió en el epicentro del fútbol mundial con la realización del 75° Congreso Ordinario de la FIFA, evento que por primera vez se desarrolló en Paraguay y que significó un hecho histórico para Sudamérica. Participaron representantes de las seis Confederaciones y de las 211 federaciones afiliadas al ente rector del fútbol mundial. El congreso fue encabezado por Gianni Infantino, presidente de la FIFA, acompañado por Robert Harrison (APF), Alejandro Domínguez (CONMEBOL) y el presidente paraguayo Santiago Peña. La jornada tuvo una fuerte impronta sudamericana, marcada por una propuesta para transformar el Mundial 2030 en una celebración global.
Una propuesta para la historia
El presidente de CONMEBOL, Alejandro Domínguez, propuso reflexionar colectivamente sobre cómo conmemorar los 100 años del primer Mundial. Invitó a pensar una Copa del Mundo “distinta, participativa y global”, que se dispute en simultáneo en tres continentes, con 64 selecciones, para que “nadie quede fuera de la fiesta”.
Según explicó, esto permitiría que países como Argentina, Uruguay y Paraguay alojen al menos un grupo completo cada uno, dotando de simbolismo y participación al Mundial del Centenario.
Mundial de Clubes y balances institucionales
Otro de los grandes protagonistas del evento fue el nuevo formato del Mundial de Clubes, que tuvo una destacada presentación. También se abordaron informes financieros, revisiones presupuestarias para los ciclos 2023-2026, y se eligieron nuevas autoridades de las comisiones de Ética, Apelación y Gobernanza.
Mauricio Macri, presidente de la Fundación FIFA, presentó el balance de 2024 y una proyección para 2025. Destacó que la entidad ya alcanza a un millón de personas y reafirmó el compromiso de usar el fútbol como herramienta para el bienestar social.
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Debates internacionales y mirada al futuro
En el cierre del congreso, se trató el pedido de la Federación Palestina en relación al conflicto con Israel. Infantino, en su discurso, pidió unidad y reforzó el compromiso en la lucha contra el racismo y la discriminación en el deporte.
Aunque no figuraba formalmente en el temario, también hubo espacio para conversar sobre la Copa del Mundo 2026 y las futuras ediciones del certamen. Se definió, además, la sede del próximo Congreso de la FIFA, en lo que será una nueva oportunidad para seguir delineando el rumbo del fútbol global.
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