La China Suárez habló acerca del video íntimo de Mauro Icardi filtrado, ¿es real?

Eugenia “La China” Suárez confirmó que el video íntimo de Mauro Icardi que se viralizó recientemente en redes sociales es auténtico y ya fue denunciado penalmente. La actriz calificó el hecho como un delito y anticipó que el caso está en manos de la Justicia tanto en Argentina como en Italia.

En declaraciones realizadas este domingo en el aeropuerto de Ezeiza, mientras se preparaba para viajar con sus tres hijos a Turquía, Suárez se refirió por primera vez al tema y fue categórica: “Es un video íntimo, es privado y está penado por la ley. Está hecha la denuncia. Es un delito”.

Qué dice el video y cómo se difundió

El video fue originalmente enviado por Icardi a Wanda Nara en 2021, en el contexto de la crisis matrimonial que enfrentaron ese año. Sin embargo, días atrás, la modelo uruguaya Natasha Rey lo hizo público, lo que generó una ola de comentarios, reacciones mediáticas y una fuerte respuesta del entorno del futbolista.

Aunque en un primer momento Icardi negó que se tratara de él, terminó reconociendo la veracidad del material y apuntó directamente contra Rey y contra Wanda Nara, quien —según el jugador— podría haber facilitado la divulgación del contenido íntimo.

Acciones judiciales en marcha

Tanto Mauro Icardi como Suárez avanzaron con acciones legales por “pornoextorsión” y “divulgación de material íntimo sin consentimiento”. El abogado del futbolista indicó que la causa ya fue presentada y se encuentra en análisis por parte de la Justicia argentina. A su vez, en Italia también se radicó una denuncia vinculada al mismo hecho.

En Argentina, este tipo de delitos están contemplados en la Ley de Violencia Digital y pueden ser penados con entre 3 y 10 años de prisión. En Italia, la pena va de 1 a 6 años, y puede agravarse si existe una relación previa entre el agresor y la víctima.

Un conflicto que trasciende lo mediático

Este nuevo capítulo en la historia que involucra a Mauro Icardi, Wanda Nara y La China Suárez reaviva un conflicto que combina celos, infidelidades y redes sociales. Ahora, con el caso judicializado, el foco está puesto en la protección de la intimidad digital y la condena a quienes violan esos límites.

La actriz, que había intentado mantenerse al margen del escándalo, rompió el silencio con contundencia, marcando el inicio de un proceso judicial que podría sentar precedente sobre la privacidad y los derechos digitales en el ámbito del espectáculo y más allá.