¿Qué dijo el CEO atrapado infraganti con su amante en el recital de Coldplay?

Byron difundió un comunicado en redes sociales tras ser expuesto junto a su empleada por la “kiss cam” y volverse viral. 

El momento ocurrió durante un concierto de Coldplay, cuando la “kiss cam" (la cámara del beso, en inglés) enfocó a la pareja clandestina. Tras volverse viral, el hombre publicó un comunicado para pronunciarse al respecto.

En el video se puede observar como Chris Martin, líder de la banda británica, expone sin querer al director ejecutivo abrazando a una mujer que no es su esposa. Al notar que están siendo filmados, la susodicha se cubre el rostro y le da la espalda a la cámara, mientras que el CEO se agacha hasta desaparecer de la pantalla.

La manera en que reaccionaron a la exposición hizo más evidente el affaire entre Andy Byron y Kristin Cabot, provocando las risas incómodas del público.

A través de un comunicado, el CEO expresó: “Quiero reconocer el momento que ha estado circulando en línea y la decepción que ha causado”. Y admitió: "Lo que se suponía que iba a ser una noche de música y alegría se convirtió en un error profundamente personal que se desarrolló en un escenario muy público. Quiero disculparme sinceramente mi esposa, mi familia y mi equipo. Merecen algo mejor que yo”.

“Esto no es lo que quiero ser ni cómo quiero representar a la empresa que ayudé a construir. Me estoy tomando un tiempo para reflexionar, asumir la responsabilidad y determinar los próximos pasos, tanto personales como profesionales. Pido privacidad mientras navego por ese proceso”, agregó.

Después de la autocrítica, Andy Byron responsabilizó a Coldplay por haberlo expuesto junto a Kristin Cabot sin su permiso: "También quiero expresar lo preocupante que es que lo que debería haber sido un momento privado se haya hecho público sin mi consentimiento. Respeto a los artistas y animadores, pero espero que todos podamos pensar más profundamente sobre el impacto de convertir la vida de otra persona en un espectáculo".

Y cerró: “Como cantó una vez un amigo: ‘Las luces te guiarán a casa y encenderán tus huesos, y yo intentaré arreglarte’”.