Con el curso para repitentes en el colegio Nacional "están forzando un cambio que pone en riesgo la identidad de la escuela”

El director de la Escuela de Educación Secundaria Orientada N° 428 “Luisa Raimondi de Barreiro”, Jorge Odetti, manifestó su preocupación por la decisión de las autoridades educativas de crear un nuevo curso de primer año en el turno tarde, que estaría conformado mayoritariamente por estudiantes repitentes derivados de otras instituciones.

“La discusión no es si un curso sí o un curso no, si repitentes sí o no. El tema es qué quieren los estudiantes, qué quieren las familias de Rafaela”, remarcó el director en díalogo con RADIO RAFAELA . Y fue tajante: “Esta escuela tiene identidad de un solo turno, y eso es lo que las familias valoran y eligen”.

Un giro inesperado y poca información

El director Odetti explicó que a principios de abril recibió un llamado desde la Regional IV de Educación informando que se iba a crear un nuevo curso. “Yo me sorprendí. No entendía de qué estaban hablando. Luego se dijo que no era un curso nuevo, sino un traslado desde otra escuela. La información fue escueta, confusa y desgastante”, señaló.

El directivo hizo hincapié en el impacto institucional de sumar un nuevo turno: “El 80% de nuestros estudiantes hace actividades extracurriculares por la tarde. El cambio afecta sus rutinas, las dinámicas de cursado y la organización general de la escuela. No tenemos personal de limpieza, administrativos ni preceptores designados para ese horario”, advirtió.

“Nos están forzando a gestionar un problema que no es nuestro”

El director también apuntó contra la falta de planificación: “Nos piden que trabajemos para que no pase lo que pasó en otras instituciones, que también empezaron con un segundo turno y terminaron perdiendo su esencia. ¿Por qué cargarnos de trabajo por una decisión que no fue nuestra, y que además contradice todo lo que el propio gobierno dice promover en los concursos de ascenso?”, cuestionó.

Finalmente, Jorge se refirió a la falta de equidad en la asignación de vacantes: “Hay familias que viven a tres o cuatro cuadras y no consiguieron lugar en nuestra escuela. Y hay estudiantes repitentes que viven en barrios muy alejados a los que ahora se los obliga a venir. No hay justicia, ni equidad, ni siquiera sentido común”, concluyó.

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