Un exfuncionario de la región fue condenado por la muerte de un niño en una obra municipal

En una sentencia que ha generado muchas repercusiones, Gustavo Bazán, ex secretario de Obras Públicas de la Municipalidad de Morteros, fue condenado a dos años de ejecución condicional y a la inhabilitación por siete años para ocupar cargos públicos, por la muerte de un niño de cuatro años ocurrida en abril de 2014.

La tragedia sucedió cuando Patricio Pedraza, el pequeño de cuatro años, cayó a una boca de tormenta en la esquina de Estrada y Pringles, en Morteros, que carecía de la loza de cobertura, un descuido que terminó en la muerte del niño por ahogamiento. La boca de tormenta estaba llena de agua, aproximadamente un metro y medio, cuando el niño fue encontrado horas después por los Bomberos Voluntarios, tras una intensa búsqueda iniciada por su familia.

El juicio, que se llevó a cabo en la Cámara del Crimen de la ciudad de San Francisco, concluyó con un acuerdo abreviado, donde el acusado reconoció la responsabilidad en el hecho. Según el abogado penalista de la familia Pedraza, Dr. Luciano Fernández Cabanillas, este reconocimiento llevó a la pena de dos años de prisión condicional, además de la inhabilitación para ocupar cargos públicos por un periodo de siete años.

La condena refleja la grave negligencia en la gestión del mantenimiento de la infraestructura pública, un hecho que conmocionó a la ciudad de Morteros, especialmente a la familia de la víctima, que buscó justicia tras la pérdida trágica de su hijo.