Trabajó 17 días seguidos juntando kiwis en Nueva Zelanda y contó cuánto ganó: “Con cada pago se me pasaba el cansancio”

Un joven argentino se volvió viral al contar cuánto ganó por trabajar 17 días consecutivos en una fábrica de kiwis en Nueva Zelanda. Lo hizo a través de su cuenta de TikTok, donde relató detalles de la experiencia que le permitió juntar, en poco más de dos semanas, una suma equivalente a unos 3 millones de pesos argentinos.

"Y pará, ya sé lo que estás pensando. ¿Quién trabaja 17 días seguidos? Tranqui que esto no es normal, fue mi decisión", aclaró el joven desde el comienzo del video, anticipando posibles críticas por la intensidad del ritmo laboral que eligió asumir voluntariamente.

Cuánto ganó y por qué eligió hacerlo

El protagonista explicó que tomó la decisión motivado por su objetivo de ahorrar en poco tiempo. Ya había tenido una experiencia similar trabajando en el país, pero según contó, en esa ocasión le pagaron “mucho menos de la mitad” por un esfuerzo físico comparable.

En Nueva Zelanda, en cambio, ganó 4171 dólares neozelandeses, lo que representa alrededor de tres millones de pesos argentinos al tipo de cambio actual. El trabajo consistía en tareas dentro de una planta empacadora de kiwis y, aunque reconoció haber terminado exhausto, aseguró que la motivación económica fue clave.

"Con cada pago semanal se me pasaba todo el cansancio y quería laburar más", confesó en uno de los fragmentos del video que se volvió tendencia.

Repercusiones en redes: entre la admiración y la polémica

La publicación no tardó en viralizarse y generó cientos de comentarios. Muchos usuarios lo felicitaron por su disciplina y voluntad de trabajo, señalando que su experiencia sirve como ejemplo de esfuerzo bien remunerado en otros países. Otros, en cambio, pusieron el foco en las condiciones laborales que permiten —o no desaconsejan— jornadas tan extensas de forma consecutiva, más allá de que hayan sido decididas por voluntad propia.

En cualquier caso, la historia de este joven trabajador argentino se convirtió en un reflejo del fenómeno creciente de quienes buscan oportunidades laborales en el exterior, especialmente en economías con monedas más fuertes y salarios más altos.